Miércoles de insomnio, uno más, uno tras otro. Los días de la semana se me consumen como los cigarrillos que sujeto entre los dedos. Como los años que pasan y así, ya casi si darme cuenta, van veinticinco. Me asombro de lo sorprendente del tiempo, de las ideas, de los pensamientos y de mis estados volátiles. Me percato de mis locuras transitorias que en su momento me parecieron emocionantes y que ahora, desde la mierda de distancia temporal me parecen una auténtica basura. Yo que sé. De nuevo un estado de incertidumbre de esos que pesan un poco en la espalda. Pero qué le pasa al mundo. Pero qué demonios pasa con el pasado. ME REVIENTA no saber pasar página. Y mucho más me revienta que los demás tampoco sepan. Que sí, que vale. No puedo dar mucho más de lo que simplemente soy. No me puedo cambiar. Ni me puedo reinventar cuando no sé realmente ni cómo me he inventado. No sé hacer que nadie pueda perder la cabeza, por mí, que la pierda. Sólo sé perderla yo. Y es muy difícil no volverse loca buscando constantemente mi pelota por todas partes para saber dónde me la he dejado y volverla a dejar en su sitio. Es agotador. Y es cierto que me siento un tanto estúpida a veces. Y es cierto que cada día que pasa tengo más miedo, y más y más y más. Y lo peor es que a pesar de que soy consciente de todo lo que ocurre a mi alrededor, no hago absolutamente nada para que mi mierda de espiritualidad me ayude a mí. No sé ayudarme. No sé hacerlo. Sólo sé hacerme daño.
Y no soy nada. Y no significo nada. Nada para nadie.
Y esa es la PUTA verdad.
ResponderEliminarNo soy NADA.
Todos somos algo... todos! no te tortures, la tortura no sirve de nada, aunque las mentes más creativas eran las más torturadas. ánimo Ales y feliz nananá...
ResponderEliminarNo eres la única.Yo tampoco soy NADA.:(
ResponderEliminarTambién,quería decir...
ResponderEliminarSiempre somos algo, claro. Siempre. Pero muy pocas veces somos lo que realmente nos gustaría ser.
ResponderEliminarNo merezco ser una opción.
Ya no quiero ser una opción.
NO ME DA LA GANA.
Hola Ales!
ResponderEliminarMira, he llegado aquí por casualidad, aunque en ciertas ocasiones no creo que sean casualidades, digamos que son atajos para tomar consciencia... los egipcios sabían mucho de la realidad interior, de ese vacío mental que lo llena todo y que no incluye a nuestros pensamientos condicionados, que repetimos constantemente ante los mismos estímulos, la famosa ACCIÓN-REACCIÓN... esa es parte de nuestra personalidad, la punta del iceberg... cuando tocamos fondo, cuando más oscuro está nuestro futuro, es cuando surge la lucecita que nos empuja a seguir caminando... Asi es en la naturaleza antes de amanecer el sol y así es en nuestro interior.
Estamos obsesionados con TENER y que nos valoren por lo que podemos conseguir... eso es una locura. Lo importante es SER, la sabiduría se demuestra siendo coherente con lo que creamos es el camino correcto, que seguro irá variando según tomemos más consciencia de nuestra realidad interior.
En el silencio encontramos las señales, en el camino las pruebas y en la acción la felicidad.
He conocido lo oscuro y ahora sólo camino en un eterno presente, sin mirar hacia atrás ni para coger impulso!
Tu espiritualidad de mierda me ha traído hasta aquí, porque tengo una alerta sobre espiritualidad... La mierda nutre el campo, lo abona para que la semilla madure, por eso es tan importante aprender de todos nuestros errores y saber perdonarnos, ya que estando en este cuerpo terrenal, nada es perfecto.
Recuerda que la vida implica movimiento y todo lo que se estanca, se pudre... cada cual es libre de mirarse el ombligo o mirar al horizonte y caminar, simplemente caminar, respirar y actuar según nuestro ideal.
Bueno, cómo dicen en el teatro MUCHA MIERDA!!!
P.D.: Lo decían porque el tener mucha mierda de caballo en la entrada del teatro significaba pleno!!!
Te deseo de corazón unas Felices Navidades y un año nuevo lleno de muchas caminatas hacia el interior!!
Un abrazo, Guillermo.
joder guillermo, muchas gracias!
ResponderEliminar:)
y a ti también anita!