Ayer un amigo me comentó que el ser humano es felíz por naturaleza, pero que la relación en su medio en ocasiones puede ocasionarle perturbaciones varias que pueden desintegrar ese sentimiento de alegría para convertirlo en la mayor de las pesadumbres... Yo no se si estoy muy segura de ello...
La verdad es que ultimamente desprendo alegría a raudales, no se si por el hecho de que ya ha llegado el buen tiempo, de que me siento renovada, libre y majestuosa, si, porque no, majestuosa suena bien (como la reina de Saba, si cabe).
El caso es que en el camino de esa ansiada alegría que se supone que buscamos pero que todo el mundo tiene, existen un sin fín de anhelos y de ilusiones, las cuales intentamos conseguir de manera intermintente algunos, de cualquier forma posible en otros... aunque en ocasiones ese camino es bastante escabroso y conlleva demasiados desvelos con lo cual esos sueños, de la manera que sean, se truncan, se vuelven humo de chimenea y se desvanecen por el cielo como pompas de jabón arrastradas por el aire... Y en ese momento experimentas una extraña reacción en tu cuerpo,... y la notas en tu corazón...son pinchazos,...pequeños dolores en el alma, intermitentes y súmamente horribles,...y de ese dolor surgen espinitas, como a las rosas,...brotan en nuestra materia blanda, en el centro, en el motor de nuestro mecanismo... Y una vez echan raíces es muy difícil intentar que estas desparezcan como por arte de magia,... es imposible, hay que arrancarlas, hay que deshacerse de ellas antes de que sea demasiado tarde e inhunden nuestra vida de malas hierbas. Por eso hay que tener cuidado con ellas, porque son peligrosas y porque pueden durar toda la vida.
Di NO a las espinitas. NO MORE ESPINITAS.
Y en un jardín...
La verdad es que ultimamente desprendo alegría a raudales, no se si por el hecho de que ya ha llegado el buen tiempo, de que me siento renovada, libre y majestuosa, si, porque no, majestuosa suena bien (como la reina de Saba, si cabe).
El caso es que en el camino de esa ansiada alegría que se supone que buscamos pero que todo el mundo tiene, existen un sin fín de anhelos y de ilusiones, las cuales intentamos conseguir de manera intermintente algunos, de cualquier forma posible en otros... aunque en ocasiones ese camino es bastante escabroso y conlleva demasiados desvelos con lo cual esos sueños, de la manera que sean, se truncan, se vuelven humo de chimenea y se desvanecen por el cielo como pompas de jabón arrastradas por el aire... Y en ese momento experimentas una extraña reacción en tu cuerpo,... y la notas en tu corazón...son pinchazos,...pequeños dolores en el alma, intermitentes y súmamente horribles,...y de ese dolor surgen espinitas, como a las rosas,...brotan en nuestra materia blanda, en el centro, en el motor de nuestro mecanismo... Y una vez echan raíces es muy difícil intentar que estas desparezcan como por arte de magia,... es imposible, hay que arrancarlas, hay que deshacerse de ellas antes de que sea demasiado tarde e inhunden nuestra vida de malas hierbas. Por eso hay que tener cuidado con ellas, porque son peligrosas y porque pueden durar toda la vida.
Di NO a las espinitas. NO MORE ESPINITAS.
Yo ya lo estoy poniendo en práctica,... y pobre del que ose interrumpir la poda...
( tengo unas tijeras enormes...)
Y en un jardín...
Seabear. Catpiano
Pues déjamelas por fa. Yo tengo aún una o dos enquistadas y muy feas :)
ResponderEliminarpues recortate la tocha, patalambre
ResponderEliminarfuera espinas!!!
ResponderEliminaryo tengo un buen remedio, hay que sembrar los anhelos y regarlos cada día para que se conviertan en sueños realizables.... :o)
saludos
lo
www.lovintrash.blogspot.com